Los puertos de todo el mundo están haciendo una apuesta por la digitalización. Tecnologías disruptivas como la inteligencia artificial, el Internet de las Cosas o el edge computing, entre otras, sustituyen muchas tareas manuales y permiten mejorar en términos de eficiencia, control, seguridad y sostenibilidad.
Una de las características del uso de drones en puertos es la inmediatez. Permite conocer y evaluar los procesos en tiempo real, para así reducir los tiempos y ganar en efectividad. Para los puertos, subirse al carro de la digitalización implica no quedarse atrás en un mundo que avanza cada vez más rápido y de forma conectada.
Drones
Los drones o sistemas aéreos de control remoto permiten llegar en cuestión de pocos minutos a lugares de acceso difícil e incluso peligroso. Así, son una herramienta para captar imágenes y datos, por ejemplo, en depósitos de contenedores para detectar sus códigos desde el aire.
También pueden usarse con objetivos como:
- Mejorar la seguridad de las instalaciones y de las condiciones de trabajo de los operarios, controlando el flujo de tráfico desde cualquier punto.
- Supervisar tareas de mantenimiento e inspección de instalaciones. Para esto, en las actividades de los puertos, tienen cabida tanto drones con cámaras convencionales como aquellos con otras de usos más específicos, como infrarrojas, termográficas o fotogramétricas.
- Auditar los contenedores presentes en los depósitos del puerto. Esto permite revisar el stock de contenedores apilados desde cualquier perspectiva, incluso desde una gran altura.
- Monitorizar la presencia de mercancía peligrosa. Por sus características, los contenedores con mercancía peligrosa deben almacenarse y manejarse siguiendo directrices de seguridad. Los drones facilitan revisar que se cumple correctamente esta labor.
Además, el proyect PORTwings, desarrollado en el Puerto de Hamburgo, busca sacar partido a una de las principales ventajas de los drones: la inmediatez. El objetivo de la iniciativa es utilizar drones para actuar con más velocidad en caso de accidente. Tal y como señalan desde este puerto alemán, los datos del sensor y las imágenes se envían de forma casi inmediata a los especialistas que deben actuar en caso emergencia.
Edge computing
El edge computing analiza los datos recopilados por los dispositivos prácticamente en tiempo real, por lo que es posible saber qué ocurre en un puerto en cada momento. Esto es posible ya que desplaza el procesamiento de los datos de la nube a los propios dispositivos que los generan (Edge Devices).
El edge computing permite hacer previsiones, optimizar los ritmos de trabajo, anticipar las tareas de mantenimiento y mejorar la seguridad, al recibir información de forma más rápida facilita la toma de decisiones. Puede, por ejemplo, optimizar la eficiencia de los vehículos autónomos, que recogen información de su entorno mientras circulan.
Un ejemplo de caso de éxito es el de Puerto de Bilbao, que utilizó esta tecnología junto a Telefónica y AllRead para el control de accesos y la detección de mercancía peligrosa. Asimismo, el Puerto de Barcelona inició en 2020 el proyecto piloto 5G Maritime, una iniciativa para validar la localización de los barcos en tiempo real, combinando inteligencia artificial, 5G, cloud computing y edge computing.
Blockchain
El blockchain tiene un gran potencial para agilizar la cadena logística de los puertos. Se trata de una tecnología que permite que las transacciones se procesen de forma descentralizada y sean validadas por la propia red. Esto garantiza procesos más transparentes, facilita la trazabilidad y da confianza a todos los agentes implicados.
En los puertos, la cadena de bloques permite saber la localización exacta de barcos y contenedores, monitorizar las mercancías y acortar los tiempos de gestión, entre otras acciones. Así, mejora la eficiencia de los procesos.
Un ejemplo de uso de blockchain en los puertos es TradeLens. Este proyecto del Puerto de Valencia permite a varios socios compartir en tiempo real la información relativa a una transacción. Su uso, señalan desde el puerto valenciano, reduce el tiempo de tránsito de un envío hasta un 40 %.
Inteligencia Artificial
La Inteligencia Artificial (IA) es la habilidad de las máquinas de pensar, aprender y planificar para conseguir determinados objetivos, y múltiples puertos y terminales como Hutchison Ports BEST están adoptando la Inteligencia Artificial. Esto es así ya que, en el entorno portuario, la IA permite que las máquinas y los dispositivos tomen sus propias decisiones, y complementa el trabajo de los equipos humanos mejorando la eficiencia de las operaciones.
Entre los usos de la Inteligencia Artificial en los puertos están los siguientes:
- Monitorizar la entrada, la salida y el registro de los vehículos y las mercancías.
- Automatizar el traslado y la clasificación de la carga.
- Planificar y organizar las tareas y los ritmos de trabajo.
- Seleccionar las rutas de reparto marítimas y terrestres más eficientes.
- Mejorar los sistemas de seguridad.
- Identificar las mercancías en tiempo real.
La IA puede mejorar las prestaciones de otras tecnologías ya existentes y de uso habitual en los puertos. Por ejemplo, los sistemas OCR tradicionales, diferentes a los software OCR con Inteligencia Artificial. La tecnología de reconocimiento óptico de caracteres se utiliza para leer los códigos utilizados en la industria logística y, así, identificar los vehículos y contenedores que entran en el recinto.
Los sistemas OCR, optimizados gracias a la IA y modelos de deep learning, promueven la autonomía y la eficiencia de los puertos. Sistemas como los analizados en nuestro ebook ‘Cómo la Inteligencia Artificial transforma la trazabilidad en los puertos’ permiten detectar automáticamente cualquier código, incluso en situaciones de baja visibilidad, sin necesidad de contar con grandes infraestructuras de hardware y con tiempos de respuesta muy rápidos.
Internet de las Cosas (IoT)
El Internet de las Cosas (IoT) es otra tecnología con gran potencial para transformar los puertos. Permite agrupar e interconectar dispositivos a través de la red con el objetivo de recopilar datos y analizarlos posteriormente. De este modo, la tecnología IoT crea una gran red a la que pueden unirse barcos, contenedores, vehículos autónomos y otros elementos.
En los puertos, el IoT permite controlar la entrada y la salida de las embarcaciones, hacer un seguimiento de las cargas y monitorizar el trabajo de los operarios, por ejemplo. Compartir datos a través de la red elimina operaciones manuales, como los registros de localización de las mercancías.
Los dispositivos IoT pueden utilizarse también para realizar tareas de control y mantenimiento del entorno portuario. El Puerto de Algeciras, por ejemplo, cuenta con un sistema conectado para medir la calidad del aire y del agua, y controlar así el impacto de su actividad en el medioambiente. El Puerto de Rotterdam, por otro lado, ha desarrollado una plataforma para obtener datos sobre las condiciones meteorológicas.
Los dispositivos conectados a un sistema IoT generan una gran cantidad de datos que pueden utilizarse para extraer información y patrones predictivos.
La tecnología en puertos: clave para la transformación digital
La lista de tecnologías disruptivas capaces de transformar los puertos no acaba aquí. La robotización, los gemelos digitales, la realidad virtual o los vehículos autónomos, por ejemplo, son otras de las innovaciones que ya han empezado a cambiar el paradigma.
Referencias:
‘5G Maritime‘, 5G Barcelona.
‘Port of Rotterdam puts Internet of Things platform into operation’, Puerto de Rotterdam.
‘PORTwings‘, Autoridad Portuaria de Hamburgo.
‘TradeLens, Autoridad Portuaria de Valencia.
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